NORGESTION ha actuado como asesor financiero de Pomona.
Expansión.- Víctor M. Osorio. Madrid.- El grupo Pomona, líder en la distribución de productos a la hostelería en Francia, suma una nueva operación en España dentro de su objetivo de liderar una concentración del sector en el mercado nacional para convertirse en un operador de referencia.
La empresa gala ha cerrado la compra de Sanamar Alimentación, un grupo con sede en Málaga especializado en la distribución de productos del mar congelados a la restauración y tiendas de alimentación especializadas.
El coste de la operación, asesorada por NORGESTION y Martínez-Echevarría, no ha sido desvelado. Sanamar Alimentación, con un total de 105 trabajadores, cerró el ejercicio 2022 con una facturación de 35 millones de euros. El equipo gestor seguirá al frente de la compañía. “Sanamar ha tenido un fuerte crecimiento en los últimos años, pero sigue teniendo potencial para crecer más.
Nuestro objetivo será impulsarla, al igual que sucede con Friolisa (Cataluña) y Novafrigo (Madrid), a la vez que seguimos buscando oportunidades tanto en España como en Portugal”, explica Erik Plas, director general de Pomona Iberia.
El directivo señala que el sector de la distribución a la hostelería está muy atomizado en España, con decenas de empresas con una facturación inferior a los 20-30 millones de euros, a diferencia de lo que sucede en otros países, como Francia y Alemania, donde un puñado de compañías dominan el mercado. “Se ha iniciado una cierta concentración y nosotros queremos ser un actor activo, aunque es un proceso lento”, añade.
La compra de Sanamar Alimentación eleva la cifra de negocio de Pomona Iberia hasta los 125 millones de euros, lo que convierte ya al grupo en uno de los cinco más grandes de su sector en España. Si se excluye a Makro y Transgourmet, con un enfoque no exclusivo de entrega al cliente, ya que también suman cash & carry, Pomona Iberia ya estaría en el top 3 de su mercado.
El grupo francés aterrizó en España en 2014, con la compra de Cadaico, un proveedor de restaurantes del área de Barcelona con sede en Mercabarna. Tres años después, adquirió Friolisa, otra empresa catalana con sede en Vilafant (Girona). Ambas empresas se integraron en 2019 en Friolisa, creando un distribuidor con presencia en toda Cataluña.
El salto del grupo fuera de esta región llegó el año pasado, con la compra de Novafrigo, una compañía con sede en Torrejón de Ardoz (Madrid) y especializado en la distribución de productos alimentarios para la restauración. Ahora, Sanamar le ofrece presencia en otra región clave del país para la restauración como es Andalucía, además de su experiencia en una categoría clave y complicada de operar como los productos del mar congelados. La empresa no ofrece claves sobre sus próximos movimientos, aunque su estrategia es tener presencia en las zonas más turísticas y pobladas del país.
Pomona facturó el año pasado 4.600 millones de euros. El grupo galo suma 80 compañías con unos 11.500 empleados en los tres mercados donde opera: Francia, Suiza y España.
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